viernes, 18 de enero de 2013

Cartas perdidas

"Si sintieras lo que yo siento, dejarías de hacer lo que haces. El problema no son los actos por sí solos, si no los sentimientos que esos actos llevan consigo. Y parece que no eres consciente de las consecuencias de todo ello, y espero que no te tengas que dar cuenta por las malas. Estoy cansada de estar triste y de tener miedo, de desconfiar y además pensar que te hago daño con todo ello. No quiero más de eso y no voy a aguantar mucho tiempo así.
Confío en ti"




"Abuelito, no sabes lo que me gustaría poder ir en tu coche contigo. Sí, el inconfundible por los restos de bocados en las puertas de los asientos traseros. Creo que tu coche es tu más vivo recuerdo, aquello que te daba la vida"
Y ahora creo que voy a ser yo quien mantenga vivo tu recuerdo. Aunque no sea el mismo en el que te recuerdo, no sé cómo reaccionaré cuando me siente donde tú tantas horas has pasado sentado, pero no puedo más que imaginarme tu sonrisa cuando lo pienso. Te quiero, abuelo.



Estoy de exámenes, así que el tiempo libre es escaso o nulo. Esta tarde tengo que tomar una de las mayores decisiones que he tomado... ¿irme de Erasmus o no? Hay tantas cosas a tener en cuenta...

jueves, 10 de enero de 2013

Allá por el 1600...

...alguien escribió algo que aún hoy sigo pasando. Triste, pero cierto. Y cabrea, también.
Quizás los personajes en cuestión cambien pero la idea es la misma.

¿A qué me refiero? Aquí lo tenéis, en inglés y español (así cada cual elige) [Hamlet, Ed. Catedra]



A una le da por pensar cuando ve que pasa algo que no le gusta y que ya se criticaba hace 4 siglos, pero seguimos de brazos cruzados viendo cómo se rien de nosotros. Visto lo visto, es algo que viene en nuestra educación y cultura... pero, 
¿por qué no cambiarlo?

martes, 1 de enero de 2013

Navidad... Año nuevo

Esta creo que ha sido la Navidad más deprimente de mi vida.
Le ha faltado la magia, la alegría, la unidad. Ha faltado gente, mucha gente, y cariño a montones. Me han faltado ver esos ojos azules de mis abuelos, iluminados de la alegría de vernos a todos juntos; y han sobrado los ojos tristes de mi abuela al ver todos los que faltan. Cada uno de los momentos ha tenido un sabor agridulce, aunque se haya escondido entre sonrisas entrecortadas.
Sería capaz de describir lo que cada una de las sonrisas que he visto estos días esconden, pero prefiero no pensarlo para negarme a mí misma que todo va mal.
Falta amor, falta cariño, falta magia, falta unidad.
Nunca entendí eso de "yo ya no creo en la Navidad", pero ahora empiezo a pensar que es posible hacerlo. Aún así, hay que saber sacarle jugo a todo, lo mejor y por eso soy capaz de decir "te quiero" y dar besos y abrazos a todo el que me lo pida, aunque no sea directamente.
El otro día una amiga me dijo "Cristina, últimamente estás tú muy cariñosa. Lo mejor es que no sé cómo lo haces, pero siempre me das un abrazo cuando más lo necesito". Sí, creo que después de 8 años contigo, y dos de ellos compartiendo piso, son suficientes como para que esos ojitos azules me digan que me necesitas. Y me encanta saber que tú también ves en los míos lo que necesito yo. Aunque hay más ojitos azules por ahí que me sacan sonrisas a diario, todo hay que decirlo =)
Pero es que, vosotros, blogueros, también me hacéis un poquito más feliz con vuestros comentarios. Nunca pensé que esos abrazos y ese apoyo que me mandáis a menudo serviría para tanto. Pero ahora que sé lo que vale, espero no perder nunca las ganas de escribir aquí ni de leeros.

Así que nada, entre tanto sentimentalismo navideño... Feliz Año a todos, un besazo y un abrazo todavía mayor.